Desde hace varios años, los huertos urbanos se han vuelto populares en las grandes ciudades, ya que se puede aprovechar cualquier espacio pequeño, como una azotea, un balcón o un jardín, para cultivar algunas hortalizas y frutas.

Por supuesto, tiene un gran impacto a nivel ambiental y personal, ya que, en primer lugar se promueve el desarrollo sostenible y reducen los índices de calor pues mejoran la calidad del aire. 

Por otro lado, al ver todo el desarrollo de las plantas se crea un vínculo especial con la naturaleza, además el proceso llega a ser terapeútico ya que dedicar un tiempo a su cuidado, distrae a la mente y produce una sensación de bienestar. De igual forma mejora la calidad alimenticia, pues los productos que se obtiene serán libres de químicos o pesticidas, y esto desencadena grande beneficios en la salud. ¡Hasta podrías iniciar una dieta flexitariana!

Tener tu propio huerto es más sencillo de lo que imaginas, por ello te compartimos estos 5 consejos para iniciarlo y cosechar tus propios alimentos.

1. Elige el lugar

Considera un espacio bien iluminado, que por lo menos tenga 4 horas de luz directa del sol. También debes tomar en cuenta que haya pocas corrientes de aire, pues algunas hortalizas pueden llegar a ser muy sensibles. Ya sea en la terraza o un jardín, adaptar un pequeño espacio con un poco de creatividad te hará dar ese primer paso.

2. ¿Qué macetas necesitas?

Desde unos cajones de madera hasta contenedores o macetas colgantes de materiales sostenibles, como el barro. Todo dependerá del lugar que destines, puede ser una mesa de cultivo —la cual requiere un poco más de espacio—, o un jardín vertical que te permita aprovechar al máximo un espacio pequeño.

Ya sea que tu mismo lo construyas para adaptarlo a tus necesidades o compres las macetas adecuadas tomando en cuenta la lista de frutas y verduras que sembrarás, pues algunas necesitan profundidad para que sus raíces crezcan.

3. Especificaciones de la tierra

Este es un componente esencial, pues los nutrientes en ella ayudarán al crecimiento de las hortalizas. El sustrato es un tipo de tierra con características especiales para los huertos urbanos, pues es ligera y porosa, perfecta para que las raíces crezcan. Además, se recomienda nutrir la tierra cada 8 semanas con un poco de composta, la cual puedes hacer fácilmente en casa.

4. ¿Qué semillas plantar?

Toma en cuenta que cada hortaliza tiene su temporada, si bien podrías comenzar con algunas hierbas aromáticas, un huerto urbano te da la libertad de comprar la planta y colocarla en su lugar definitivo o comenzar desde la semilla. Dependiendo la época del año, es la fruta o verdura que deberás sembrar:

  • Primavera

Por planta: tomate, berenjena, fresa y pimiento.

Por semilla: albahaca, cilantro, lechuga, rábano, espinacas, cebolla, zanahoria y pepino.

  • Verano

Por planta: betabel, rábano, maíz, pepino, melón

Por semilla: albahaca, lechuga, fresa, berenjena y pimiento.

  • Otoño

Por semilla: cilantro, espinaca, lechuga, habas, acelgas, betabel, coliflor y arúgula.

  • Invierno

Depende del lugar en el que vivas, si las temperaturas llegan a ser menores a 5 °C, las semillas podrán crecer bien: espinaca, lechuga, ajo, rábano y alcachofas.

5. El tipo de riego

Hay sistemas de riego muy sofisticados, que incluso puedes programar el goteo para que se extienda por todas tus plantas, pero no hay mejor manera de asegurar que la tierra esté siempre húmeda que regarlas manualmente. Tanto el exceso como la falta de agua es perjudicial así que basta con acercarse a observar la tierra cada 2 o 3 días.

¿Estás listo para mejorar tu entorno y tu alimentación?